Increible juego de futbolín, como los que hay en los bares y salones recreativos pero más pequeño para casa: Mide 69 x 42 x 24 cms. Tiene tres mandos en cada lateral y marcadores.
Para divertirte con tus amigos y poder jugar infinitas partidas sin tener que pagar ni un euro. Piensa en todo lo que te vas a ahorrar.
El futbolín es una de las máquinas recreativas de bar más famosas junto con el billar, el pinball y el air hockey.
Su inventor (el creador de la primera patente de mesa de futbolín en 1937) fue un español llamado Alejandro Finisterre. Este poeta, inventor y editor nacido en Finisterre también es conocido por crear el primer pasahojas de partituras accionado con el pie.
El juego del futbolín se le ocurrió en 1936 mientras se recuperaba en un hospital de Montserrat de las heridas de los bombardeos de la Guerra Civil en Madrid. Con apenas decisiete años, concibió el nuevo juego por similaridad con el ping pong, para entretener a tantos chavales también ingresados como él en el hospital.
El primer modelo de mesa de futbolín lo fabricó el carpintero vasco Francisco Javier Altuna. Alejandro Finisterre registró la patente del futbolín en 1937 siendo el primero en hacerlo.
Alejandro Finisterre, inventor del futbolín.
Después fueron los fabricantes catalanes y valencianos quienes se encargaron de distribuir el producto por toda Europa, donde ahora se encuentra presente en cientos de miles de bares, pubs, restaurantes y negocios hosteleros de todo el continente.
Tras una vida llena de aventuras, viajes, emociones y gran parte en el exilio, Alejandro Finisterre falleció en 2007 en Zamora, donde residía, a la edad de 87 años.
En el documental Tras el Futbolín Don Alejandro Finisterre, narra su fantástica vida y la creación de su gran invento, el futbolín. Es seguramente una de las últimas entrevistas de este genio antes de su muerte.
A continuación puedes ver los primeros 8 minutos del documental Tras el Futbolín: